¿QUÉ ES EL FEMINISMO?

Publicado en por Círculos de estudio Psicología para el Cambio

Por muchos años la mujer ha vivido en una constante lucha por lograr una posición notable en nuestra sociedad, una posición en la que pueda expresarse con libertad, que le permita el acceso al mundo laboral incluso en actividades que eran exclusivamente masculinas.
Por medio de esta lucha, la mujer buscaba tener los mismos derechos de los varones, sentirse respetada, considerada no sólo por su propio papel de mujer sino también en todos los aspectos de su vida, ya sea familiar, laboral, económico o social.

 

Al sentirse poco tomadas en cuenta por la sociedad, las mujeres iniciaron un movimiento que pudiera dar a conocer sus derechos, al igual que exigían un trato equitativo tanto para varones como para mujeres. La historiadora Gerda Lerner ubica el nacimiento del patriarcado como un suceso histórico en el que se documenta el principio de la subordinación de las mujeres a través de los sistemas políticos, legales, culturales, religiosos y sociales. Las mujeres que reclamaban la subordinación o que se comportaban fuera de los esquemas asignados a su sexo, eran y fueron marginadas. Es indudable que la discriminación contra la mujer siempre ha existido y que es necesario condenarla y erradicarla totalmente. Es por esto que el movimiento feminista en los EE.UU, tiene su origen en el siglo XIX, y se inicia como un movimiento pro justicia, igualdad y respeto a todo ser humano.

El denominado y tan conocido feminismo es un conjunto de teorías sociales y prácticas políticas en abierta crítica de relaciones sociales

Históricas, pasadas y presentes, motivadas principalmente por la experiencia femenina. En general, los feminismos realizan una crítica a la desigualdad social entre mujeres y hombres, y proclaman la promoción de los derechos de las mujeres.

El feminismo ha producido muchos cambios en algunas sociedades occidentales, incluyendo el sufragio femenino, el empleo igualitario, el derecho de pedir el divorcio, el derecho de la mujer de controlar sus propios cuerpos y decisiones médicas (incluyendo el aborto, tema sobre el cual no hay consenso), y muchos otros.

A pesar de los cambios positivos que se lograron por medio de este movimiento; ¿qué sucede cuando este llamado “feminismo” es llevado al extremo, siendo incluso, el polo opuesto del criticado machismo?; lo que puede suceder es que se tomen en cuenta todos los derechos de las mujeres, dejando de lado los derechos de los varones como seres humanos, tratándolos con indiferencia o incluso con desprecio y arrogancia, anhelando ser superiores que ellos y viviendo en una constante competencia; asimismo, menospreciando su labor como esposa y madre, considerándola la más indigna y denigrante de todas las labores que podía realizar la mujer ,pues opinan que no les permite realizarse plenamente en otras facetas de su vida.

En principios, el feminismo buscaba la igualdad de los géneros. Sin embargo, con el transcurso de los años, se convirtió en un feminismo radical, el cual causa mayor diferenciación y, porque no decirlo, discriminación entre ambos sexos. Es por esta razón que no debemos confundirnos cuando defendemos nuestros derechos como mujeres, debemos tener muy en claro la diferencia de lo que significa el feminismo y la equidad. Entendiéndose a esta última como un valor de connotación social que se deriva de lo entendido también como igualdad; se trata de la constante búsqueda de la justicia social, la que asegura a todas las personas condiciones de vida y de trabajo  dignas e igualitarias, sin hacer diferencias entre unos y otros a partir de la condición social, sexual o de género, entre otras. Entendiéndose también a la equidad de género como la igualdad de oportunidades y libertades para todos, no importando su sexo.

Debemos ser concientes y empezar a comprender que todos tenemos los mismos derechos y capacidades para poder hacer lo que libremente decidamos siempre y cuando nos informemos adecuadamente y tengamos en cuenta la responsabilidad para hacer valer nuestros derechos sin transgredir los derechos de los demás.

Tomemos en cuenta de que, a pesar de que muchas personas líderes feministas han sido mujeres, no todas las mujeres son feministas y no todas las personas feministas son mujeres. Muchas feministas realmente no lo son., simplemente son mujeres que piensan que los hombres y las mujeres son iguales, pero tienen que tomar posiciones de fuerza para compensar el dominio social del hombre.

 

 

 

SIEMPRE RECORDEMOS QUE... Todos debemos tener las mismas oportunidades y derechos, no caigamos en los pensamientos retrogradas de la antigua sociedad que ponía al hombre siempre como cabeza máxima o autoridad superior sobre la mujer. Hagamos nuestro mayor esfuerzo y, así como se viene realizando, todos juntos unámonos para poder lograr esta meta y podamos vivir en un mundo sin prejuicios y con equidad de género entre hombres y mujeres.

 

 

Cecilia Sumiko Serna Huemura
Estudiante de Psicologia X ciclo

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